1. No corras demasiado rápido.
En los rodajes debes poder hablar sin que se te entrecorte la voz.
2. Vigila tu postura de carrera
No corras agachado mirándote los pies (sólo con enderezarte puedes desarrollar toda tu potencia, te lesionarás menos y respirarás mejor)
Bracea correctamente ( en su pendular las manos deben rozarte el pantalón)
No corras con tesión (No aprietes los puños, piensa que llevas en la mano un pajarito)
3. Deja un par de horas entre la comida y el entrenamiento.
De no hacerlo puede aparecer el flato
4. Comprueba tu pulso por la mañana antes de levantarte de la cama.
Si tienes un 10% más de pulsaciones de lo habitual es que tu cuerpo no se ha recuperado del entrenamiento del día anterior. Tómate el día libre.
5. Haz abdominales diarios, el punto que más sufre de un corredor es la zona lumbar.
De ahí surgen la mayor parte de las lesiones. También es la causa principal de las contracturas del bíceps femoral y de la peor de un corredor: las hernias discales. Con 30 abdominales diarias, siempre con las piernas flexionadas y la barbilla cerca del pecho para evitar que se arquee la espalda, y 10 lumbares antes y después de correr, estarás prevenido.
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